Un tercio del total de los alimentos producidos en el mundo se pierden o se desperdician. Esa cantidad asciende a 1300 millones de toneladas de comida que literalmente se tiran a la basura cada año.
Entonces, ¿cómo es posible que se pierda o desperdicie tanta comida en un mundo donde una de cada nueve personas pasa hambre o está desnutrida? Y ¿qué se puede hacer al respecto?
Estas son las preguntas que estarán en el centro del debate durante los eventos del primer Día Internacional de Concientización sobre la Pérdida y el Desperdicio de Alimentos de las Naciones Unidas que se llevará a cabo el 29 de septiembre.
Generar conciencia, comprometerse al cambio
El objetivo de este día, creado por la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) y el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA), no solo es generar conciencia sobre el desperdicio de alimentos, sino también promover los esfuerzos mundiales destinados a alcanzar la Meta 12.3 de los Objetivos de Desarrollo Sostenible de las Naciones Unidas. Es decir, la intención es lograr una reducción del 50% de la pérdida y el desperdicio de alimentos para el año 2030.
Como miembro de la coalición Champions 12.3, Unilever está abocada a acelerar el progreso hacia el logro de esta meta.
Con el fin de asegurarnos que nuestra casa esté en orden, hace mucho tiempo contamos con programas para no destinar ningún residuo a vertederos. Recientemente, también nos comprometimos a reducir a la mitad la pérdida y el desperdicio de alimentos en nuestras propias operaciones globales para el año 2030, de acuerdo con la Meta 12.3.e. Y además, hemos adoptado el “enfoque Meta-Medida-Acción” de Champions 12.3 e informaremos públicamente nuestra huella de desperdicios de alimentos para aportar una mayor transparencia con respecto a estos datos.
“Solo si abordamos la pérdida y el desperdicio de alimentos podremos alimentar al mundo dentro de los límites de este planeta, mitigar el cambio climático y aliviar la presión sobre los recursos naturales. El mayor impacto y responsabilidad de Unilever se encuentra en la capacidad que exhibamos para influir sobre nuestros proveedores y clientes con el fin de que sigan nuestro ejemplo y, en especial los consumidores, desperdicien menos alimentos”, dice Hanneke Faber, presidente de Alimentos y Refrescos de Unilever.
Por qué es importante abordar el tema del desperdicio de alimentos
La pérdida y el desperdicio de alimentos es un tema invisible, subestimado, y constituye un derroche injustificado del capital humano, ambiental y económico. Un cuarto del agua que se utiliza para la agricultura cada año se consume en este asunto. Además, es uno de los principales responsables de la pérdida de ecosistemas y biodiversidad, y es también responsable del 8% de las emisiones anuales de gases de efecto invernadero de todo el mundo. De hecho, si la pérdida y el desperdicio de alimentos fuera un país, sería el tercer productor mundial de gases de efecto invernadero.
Nuestra marca Hellmann’s tiene la firme convicción de que los alimentos son demasiado valiosos para desperdiciarlos. Debido a que sus productos llegan a los hogares de millones de personas en todo el mundo, Hellmann's tiene tanto la oportunidad como la responsabilidad de generar conciencia sobre el problema de los desperdicios de alimentos provenientes de los hogares y de ayudar a las personas para que sean más ingeniosas con los alimentos que consumen.
“Sabemos que nuestra marca puede generar un cambio positivo en la forma en que nuestros consumidores utilizan los alimentos en su casa”, afirma Christina Bauer Plank, vicepresidenta de Marca Global de Hellmann’s. “Hellmann’s siempre ha ayudado a las personas a transformar incluso los ingredientes más simples en comidas sabrosas”.
Un cambio inesperado
Considerando que entre el 40% y el 45% de los desperdicios de alimentos se generan en los hogares, es evidente que cualquier cambio sustancial relacionado con la reducción de los desperdicios de alimentos depende de lograr un cambio en los hábitos y las actitudes de los consumidores.
Sin embargo, no son muchas las personas que se ven a sí mismas como las principales generadoras de desperdicios de alimentos. Algunas no son conscientes de la magnitud del problema, mientras que otras no reconocen sus propias acciones como parte de él.
No obstante, en el marco de la cuarentena, las compras restringidas y la vida confinada al hogar, la crisis del COVID-19 ha obligado a la población a prestar más atención al consumo de alimentos. Esta situación ha provocado un cambio de actitud inesperado.
Si bien el temor a no disponer de alimentos suficientes generó cierto grado de acumulación y, por ende, de desperdicios, las investigaciones han revelado que la permanencia en el hogar hizo que muchas personas apreciaran más el valor de los alimentos. Según una encuesta realizada por la agencia medioambiental Hubbub del Reino Unido, el 57% de los encuestados consideraron que aprecian más los alimentos desde el inicio de la pandemia.
Pequeños cambios con un gran impacto
Debido a que cada vez hay más personas dispuestas a adoptar comportamientos que implican menos derroche de alimentos, Hellmann's sigue intensificando los esfuerzos para generar conciencia sobre el desperdicio de alimentos y ofrecer soluciones prácticas para reducirlo.
Entre esas soluciones, se incluyen ayudar a las personas para que puedan ver el potencial de los productos perecederos, alentarlas a cocinar con los ingredientes que tienen en la heladera y, quizás lo más importante, ayudarlas a desarrollar las habilidades y los conocimientos necesarios para aprovechar al máximo los alimentos con los que ya cuentan.
En los dos últimos años, Hellmann's ha llegado a más de 100 millones de personas en Brasil y otros países con sus campañas para transformar las sobras en comidas deliciosas. Ahora, la marca está ampliando sus esfuerzos hacia los mercados de Norteamérica, América Latina y Europa.
Alianzas para alcanzar el éxito
Al asociarse con organizaciones comunitarias y ONG, Hellmann's no solo aumenta la conciencia sobre el tema, sino que también maximiza el impacto de sus programas, sobre todo de los que se centran en la redistribución de los excedentes de alimentos.
En los Estados Unidos, Hellmann's ha trabajado con organizaciones como East Side House Settlement y Farms to Food Banks para ayudar a rescatar los excedentes de alimentos de granjas y redistribuirlos a 200 000 hogares necesitados. Del mismo modo, en Canadá, el programa Real Food Rescue de Hellmann's ha ayudado a rescatar más de 100 000 comidas para brindar apoyo a las personas necesitadas.
Descifrar las razones por las que se desperdician alimentos
Sin embargo, al abordar el problema del desperdicio de alimentos, es necesario ir más allá de simplemente buscar formas de utilizar los excedentes de alimentos. También es necesario que comprendamos, en primer lugar, por qué se desperdician los alimentos.
Es por eso que Hellmann's está trabajando con destacados expertos académicos, incluidos psicólogos del comportamiento de BE Works y especialistas en la materia como la Dra. Erica Van Herpen de la Universidad de Wageningen, para comprender la psicología detrás del desperdicio de alimentos y qué factores podrían influir positivamente en el comportamiento.
“Nadie se siente bien cuando tira alimentos en buen estado”, dice Christina Bauer-Plank, vicepresidenta de Marca Global de Hellmann’s. “No tenemos que convencer a la gente de que está mal desperdiciar los alimentos. Todo el mundo lo sabe. Simplemente, tenemos que darles las herramientas para que puedan usar mejor lo que ya tienen.”